sábado, 20 de febrero de 2010

Aspectos teórico-prácticos de programas de conservación y mejora genética en razas de gallinas autóctonas

En la Exposición de Montserrat se realizaron una serie de charlas para los socios de AVIVAL, una de ellas fue ésta. Pasamos a hacer un resumen de la misma, así como un enlace a los documentos: apuntes y presentación en power point.


OBJETIVOS
Saber monitorizar los programas de conservación (evolución del parentesco, consanguinidad y variabilidad genética) y gestionar la variabilidad genética en los programas de conservación (elección de reproductores y método de apareamiento).


ESQUEMA:

1.      Conceptos básicos de genética de poblaciones
1.1.   Herencia
1.2.   Análisis de genealogías
1.3.   Diversidad genética
1.4.   Consanguinidad
1.5.   Censo efectivo de población
2.      Gestión genética de un programa de conservación
2.1.   Elección de reproductores
2.2.   Elección del sistema de apareamiento
2.3.   Recomendaciones prácticas para la gestión de un programa de conservación
3.   Conservación asistida por marcadores


RESUMEN:
El apareamiento entre familiares, conocido como consanguinidad, aumenta la proporción de genes en homocigosis, disminuyendo la variabilidad genética de la población. Esta falta de variación (unido a que los genes deletéreos son recesivos) hace que los animales no puedan adaptarse ante cambios en el ambiente (digamos gérmenes) y conlleva a la falta de viabilidad de los individuos, y la consiguiente pérdida de la población: extinción. 
Para gestionar un programa de conservación de una raza en peligro de extinción hay que intentar, en todo momento, maximizar la variabilidad genética (y que el aumento de la consanguinidad sea mínimo, ya que es inevitable que si la población es pequeña, al final todos sean parientes), lo que supone maximizar el censo efectivo de la población. 
Por ello se aconseja:
- Iniciar un programa de conservación con el mayor número posible de reproductores.
-Intentar igualar el número de machos y el de hembras
-Evitar los cuellos de botella en el censo (reducción drástica del número de ejemplares)
-Alargar al máximo los intervalos generacionales.
-Que todos los animales contribuyan con el mismo número de hijos a la generación siguiente (minimizar varianza de tamaños familiares)
-Evitar el apareamiento entre parientes (que no compartan abuelo...)


Una recomendación para los criadores de aves es la de los apareamientos circulares: se colocan las hembras en jaulas (o corrales) en círculo y dejamos las hembras en la jaula o corral que han nacido mientras que los machos pasan a aparearse con las hembras de la jaula de la derecha. 
Si conseguimos hacer 5 corrales y cambiamos de generación cada 2 años, los gallos procedentes de los nacidos en el primer corral, volverán a aparearse con las gallinas de ese corral a los 10 años de iniciar el programa. 


Los apuntes



La presentación



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